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¿Entendemos el sentido común?

El ser humano se apoya sobre ciertos pilares, tanto inherentes a su naturaleza animal como construcciones sociales e incluso productos de su cognición, que fundamentan toda su organización desde un nivel intrapersonal hasta la complejidad de un mundo globalizado. Uno de éstos, quizás el menos puesto en duda, es el sentido común. 

Claro que todos hemos oído hablar del sentido común, pero, ¿realmente somos consientes de qué es a lo que se refiere o cómo lo conseguimos? Nuestra respuesta reflejo seguramente será un sí; pero si nos detenemos a pensar un momento, posiblemente no podamos articular oración que nos deje satisfechos en tal situación.


¿Porqué es tan difícil? 


Lo primero al tratar la discusión debería ser tratar de identificar qué es el sentido común. Y aquí nos hallamos precisamente con nuestro primer conflicto. Algunos dirán que se trata de una especie de instinto primitivo que acarreamos escondido en nuestro código genético y que nos sirve para evitar dañarnos con cada paso que damos. Otros dirán por el contrario que el sentido común es una especie de patrimonio que nos vamos labrando a lo largo de la vida, probablemente citando el conocido refrán que reza: "El sentido común es el menos común de los sentidos". 

Wikipedia define al sentido común de la siguiente manera: La expresión sentido común describe las creencias o proposiciones que se alimentan por la sociedad (familia, clan, pueblo, nación o entera humanidad).

Por su parte, el sitio Definición.De inicia su entrada al respecto con este párrafo:

El sentido común son los conocimientos y las creencias compartidos por una comunidad y considerados como prudentes, lógicos o válidos. Se trata de la capacidad natural de juzgar los acontecimientos y eventos de forma razonable.

Podemos notar similitudes entre ambas, pero también es palpable la ambigüedad en ellas. Dejan abierto mucho, señalando más bien la utilidad o consenso respecto al concepto que sus raíces o naturaleza. No dejemos pasar el hecho de que ambas fueron redactadas por personas pertenecientes a una más o menos una misma cultura: la occidental contemporánea. Eso posiblemente influye en la manera en que los autores la retratan, ¿no lo consideran así?

Sin embargo, algo de lo que sí podemos partir como inicio, sin mayor temor a estar terriblemente equivocados, es que todas las culturas alrededor del mundo manejan alguna especie de equivalente que cumple las funciones de lo que llamamos sentido común.

Como pronuncié en el primer párrafo, a pesar de ser algo tan difícil de explicar, el sentido común suele darse por sentado y rara vez se cuestiona o reflexiona al respecto. Existen algunas notables excepciones, siendo en concreto El sentido común como sistema cultural, cuarto capítulo de Conocimiento local de Clifford Geertz (1994) un análisis que me permite discutir ciertos aspectos que considero interesantes.
El análisis del sentido común, a diferencia de su puesta en práctica, debe pues empezar por redibujar esta distinción difuminada entre la aprehensión objetiva de la realidad (...) y la sabiduría coloquial, mundana, los juicios y aseveraciones basados en ésta.
Geertz, C. (1994)

En esas palabras, Geertz comienza a señalar un concepto que me parece importante para entender (o tratar de entender) al sentido común, la distinción entre lo subjetivo y lo objetivo.

Muchos autores, y la población en general, entienden el sentido común simplemente como aquello que es obvio y que por ende, cualquiera con un poco de capacidad mental puede tener; ideas universales que rigen la vida humana. En su texto, Geertz analiza algunas de estas posturas y pone sobre la mesa la idea de que el sentido común tiene más que ver con la cultura en que uno se ha desarrollado. Asimismo, trata de describirlo en base a las que el llama "cuasi cualidades" que el sentido común adjudica a la realidad:

  • Naturalidad: las cosas son simples, elementales en esencia.
  • Practicidad: la más entendida de sus propiedades, el sentido común señala el camino más sencillo de hacer las cosas.
  • Transparencia: literalidad, las cosas son tal como las percibimos, sin significados ocultos.
  • Asistematicidad: se transmite como conocimiento popular, mediante dichos y no de manera académica.
  • Accesibilidad: siendo el sentido común algo "universal", cualquiera puede acceder a él.
Y así podemos ir notando que entonces el sentido común no es tan sencillo como podíamos pensar en un primer momento. Pero tampoco sería acertado considerar que por consecuencia solo algunos individuos o culturas pueden poseer un sentido común. En realidad, basta con compartir o tratar de conocer un poco de las ideologías de otros grupos humanos y nos daremos cuenta que todos tenemos una construcción social de lo que es obvio o natural, Geertz en su sentido común como sistema cultural, plantea algunos ejemplos bastante claros al respecto, tales como la percepción de tres pueblos (estadounidenses, navajos y pokot) acerca de la intersexualidad. 

Precisamente este punto es el último en que quiero enfocarme, pues podemos llegar a concluir en base a todas las reflexiones vistas hasta el momento y los ejemplos que el sentido común, efectivamente es común a todas las culturas y regiones del mundo, pero ello no implica que deba ser igual para todos o que se nazca con él, sino más bien que se trata de una construcción a la que nos vemos expuestos desde muy temprana edad de manera cotidiana. Y por tanto, podemos poseer concepciones no solo distintas, sino incluso contrapuestas respecto a lo que es natural o verdadero.



Un ejemplo de lo anterior que yo he venido analizando desde hace un poco de tiempo y espero lograr definir cada vez mejor conforme avance el tiempo es la percepción que como sociedades tenemos de un mismo evento histórico. 

Siempre se ha dicho que "los vencedores escriben la historia", pero eso no significa que todos en el mundo la acepten de manera dogmática e instantánea. Una de las mayores controversias en este sentido podría ser el tema de los bombardeos nucleares cometidos por Estados Unidos contra Japón a finales de la Segunda Guerra Mundial. Existen personas que los justifican diciendo que de otra manera la guerra se habría prolongado y se habrían perdido más vidas; otros incluso afirman que Japón los merecía por sus crímenes de guerra; pero no pocos más acusan a los Estados Unidos de haber realizado la peor atrocidad de la historia al atacar tan brutalmente objetivos civiles. ¿Quién tiene la razón?

Lo cierto es que todas esas posturas se fundamentan en hechos verdaderos e innegables, pero la perspectiva desde que se miran provoca esa diferencia de interpretación. De modo que todas y a la vez ninguna están en lo correcto. Lo mismo aplica con el sentido común, no todos consideramos exactamente igual las situaciones, pero todas nuestras percepciones son válidas, por lo que lo mejor será aprender a coexistir con distintas interpretaciones e incluso sacar un provecho de ello, enriqueciendo nuestra propia limitada concepción de la realidad. Al menos para mí eso es lo más sensato que dicta mi sentido común.




Referencias


Geertz, C. (1994) Conocimiento local: ensayos sobre la interpretación de las culturas. Barcelona, Buenos Aires, México: Paidós. Capítulo 4.

Wikipedia (2017) Sentido común [en línea] Disponible en: https://es.wikipedia.org/wiki/Sentido_com%C3%BAn

Pérez Porto, J., Gardey, A. (2010) Definición de Sentido común [en línea] Disponible en: https://definicion.de/sentido-comun/



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